Hoy vamos a cocinar una sopita de tomate y ajo, ideal para aprovechar el pan duro que tenemos del día anterior. Es una receta extremeña y de las que más me gustan, porque es de abuela, económica, con ingredientes que todos tenemos por casa, sencillita, rápida, con sabor a infancia y a tradicional y, lo mejor, está buenísima y muy sabrosa.