La crema de avellanas, azúcar y cacao fue creada por un pastelero italiano, llamado Pietro Ferrero, natural de Piamonte, región en la que los dulces a base de avellanas son muy populares. En un principio, la receta que elaboró, consistía en una especie de pasta a la que denominó Giandujot, en homenaje a un personaje de marioneta y carnaval local, muy conocido en aquella época por representar al típico piamontés. La finalidad de este producto, se basaba en la búsqueda de un remedio para subsanar el problema de la escasez de provisiones de cacao, tras la II Guerra Mundial. Presentada en forma de barra, se cortaba en porciones que, colocadas sobre pan, resultaban un verdadero manjar al que nadie podía resistirse. Así, pues, la empresa Ferrero inició sus actividades, empezando a funcionar de forma oficial, el 14 de mayo de 1946. Años más tarde, la socorrida, rica y original pasta Giandujot, pasó a convertirse en una crema para untar, bautizada como SuperCrema. Después, en 1964, Michele, el hijo de Pietro, hizo algunas correcciones en las cantidades de los ingredientes, renovando de esta manera, la composición original, a través del método prueba y error, y creando el primer tarro para ser ofrecida en el mercado. El nombre que eligió para esta nueva versión mejorada, sería Nutella. A partir de 1965, la Nutella empieza su expansión por Europa, llegando a países como Alemania y Francia, donde quedaron maravillados, no solo por el sabor tan particular y característico de esta delicatessen, sino también por el diseño de su nueva presentación. Nutella continuó su viaje por el mundo a partir de finales de los años 70, esta vez, aterrizando en lugares como Australia, donde se estableció la primera fábrica de producción, fuera de Europa. Poco a poco, fue exportándose por todas partes hasta convertirse en la crema de cacao y avellanas más famosa y estimada del universo.
Para conservar nuestra Nutella casera más tiempo
- Podemos reutilizar tarros de cristal, que tengamos por casa, de abertura ancha, más o menos del mismo tamaño y resistentes al calor. Los especiales para conservas suelen serlo. En este caso, el mío lo compré en una tiendecita en la que venden utensilios de cocina y menaje, y tiene una capacidad de 250 ml.
- Para esterilizarlo, simplemente, debemos separar la tapa del frasco, limpiar bien ambas piezas con jabón para vajilla en el fregadero; si vuestro bote tiene etiquetas, podéis introducirlo en agua caliente unos minutos y después frotar los restos de pegamento con un algodón humedecido en alcohol. Si vuestra tapa contiene plástico o cartón en su interior, deberéis retirarlo.
- Una vez todo esté bien limpio, distribuiremos la tapa y el tarro, de pie, en una cazuela en la que habremos puesto una toalla pequeña, blanca, limpia y doblada en la base. Esto último, lo haremos para evitar que el frasco se rompa, como consecuencia del movimiento al hervir, y no llegue el calor tan directo al cristal.
- Llenaremos la cazuela con suficiente cantidad de agua, para que cubra bien nuestro tarro y tapadera, y pondremos la cacerola a fuego medio, de 0-12 yo la pongo a 6.
- Cuando lleguemos a ebullición, dejamos que hierva unos 15 minutos.
- Una vez pasado el tiempo, dejamos que enfríen, primero en la misma cazuela, puesto que si los sacamos de golpe el vidrio podría romperse, después los retiraremos con las manos limpias y los ubicaremos bocabajo, sobre un paño limpio para dejar que se sequen.
- Este procedimiento, podemos llevarlo a cabo con varios envases a la vez, siempre y cuando vayamos a rellenarlos al momento, así ahorraremos tiempo y energía.
- Una vez todo esté bien seco, rellenaremos nuestro recipiente con la Nutella casera. Hay que tener presente que para poder conservarla más días, tendremos que llenarlo hasta arriba, dejando un espacio de 1 dedo libre, si después optamos por completar el proceso de esterilización al baño maría, para que no estalle. A mí, como máximo, me duró 10 días en la nevera y bien tapada.
- Si queréis, podéis continuar con la esterilización al baño maría y que os dure todavía más tiempo. En este caso, repetiremos el proceso anterior, pero colocando el tarro lleno de Nutella, bien cerrado con su tapadera, en la cazuela y con la toalla en el fondo, cubriendo de agua 3/4 partes de su tamaño, antes de llegar a la tapa, e hirviendo unos 15 minutos a fuego medio.
- Una vez seco, comprobaremos que el bote ha quedado bien sellado y lo almacenaremos en un lugar sin luz, fresco y oscuro.
- Si vais a consumirla el mismo día o al día siguiente, no hace falta esterilizar el recipiente en el que vayáis a guardarla, estando bien limpio, es suficiente.
- Todo estos pasos, sirven también para preservar por más tiempo, otro tipo de conservas, como salsas de tomate o mermeladas caseras.
Espero que os encante esta fácil delicia y os animéis a prepararla. Os dejo, como siempre, el proceso por escrito por si tuvierais alguna duda. Si hacéis alguna de las delicias del blog, podéis enviarme vuestras fotos a mi correo: belenru16@hotmail.com. Los resultados aparecerán en próximos vídeos. No olvidéis que podéis imprimir ésta y todas las recetas que se publican en el blog, pinchando en el botón "imprimir receta". Muchas gracias por vuestro siempre apoyo y por todos los comentarios amables que me dejáis a través de Youtube.
- 180 gramos de avellanas peladas, tostadas y sin sal
- 4 cucharaditas de cacao puro en polvo, sin azúcar
- 80 ml de leche semidesnatada
- 1/2 vaina de vainilla blandita
- 4 cucharadas de azúcar moreno
- Pondremos las avellanas en una picadora de alimentos, de al menos 600W de potencia, y las trituraremos unos segundos.
- Obtendremos una especie de harina gruesa de avellana.
- Retiraremos los restos de harina de avellana, de los bordes de la picadora, y seguiremos triturando en distintas veces, en intervalos de unos 10 segundos, repitiendo el mismo proceso hasta que se nos forme una mantequilla cremosa de avellana y retirando los restos de los bordes, si fuera necesario.
- Incorporaremos el azúcar y el cacao puro en polvo.
- Abriremos la 1/2 de la vaina de vainilla, con un cuchillo, por el centro y a lo largo. Terminaremos de abrirla con los dedos e iremos raspando los granos del interior, con la punta del cuchillo, para agregarlos a nuestra preparación.
- El resto de la vaina podéis guardarlo en el azucarero, para darle un toque de vainilla al azúcar, delicioso.
- Por último, verteremos la leche en la picadora y mezclaremos unos segundos.
- Una vez tengamos todos los ingredientes bien integrados, nos quedará una textura cremosita, si veis que está muy sólida, podéis añadir un pelín más de leche.
- Serviremos en un bote de cristal, con tapa y esterilizado (el mío, de 250 ml).
- Y la vamos a llevar a la nevera, al menos 1 hora. Nuestra Nutella casera, nos puede durar entre 7-10 días en el frigorífico, bien tapada.
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