27 noviembre, 2019

Agua de avena para piel limpia, sin granitos, manchas, impurezas


Hoy, para aprovechar unos copos de avena que tenía guardados en la despensa, desde hacía algunos meses, vamos a hacer algo diferente: agua de avena, pero en este caso, caserita, sin conservantes, colorantes ni productos químicos. Un remedio natural, perfecto para tonificar, cuidar y mimar nuestro rostro e ideal para tener una piel limpia, radiante, sin granitos, manchas ni impurezas. La vamos a enriquecer con un poquito de aceite de coco que, como podéis apreciar en el vídeo, hidrata muy bien y se absorbe inmediatamente. 

Copos de avena: gruesos e integrales

Además, el agua de avena, no solamente es maravillosa, usándola sobre la piel de la cara, sino también en el cuerpo, por ejemplo, después de una ducha, ya que regula el pH, calma la piel, alivia picores, es muy efectiva cuando tenemos manchitas de psoriasis y va fenomenal en caso de picaduras y quemaduras. Incluso, se me ocurre que podríamos verter un poco en la bañera, para darnos un bañito relajante de agua caliente; aparte de ser una experiencia muy agradable que ayudará a liberar el estrés de la semana, gracias al aceite de coco y la avena, va a dejarnos una piel la mar de suave y de forma natural y sin productos industriales. Un placer de la vida que, de vez en cuando, viene estupendamente. 

Agua de avena casera, con aceite de coco

Cuando la aplicamos en la piel del rostro, ayuda a limpiarla en profundidad, elimina las células muertas, reduciendo los puntos negros y resultando estupenda en pieles que tienen tendencia a tener granitos y acné. Ahora, con el frío, va fenomenal, puesto que solemos tener la piel más seca, nutriéndola y dejándola sedosa y preciosa. De igual modo, tiene propiedades que aclaran la piel, con lo que es ideal para difuminar esas manchas oscuras que salen por la edad o debido a los desajustes hormonales.
  
Agua de avena casera, con aceite de coco

A mí, me encanta utilizarla como tónico, por la noche, aplicándola después de desmaquillar la piel. Lo que hago es limpiar la cara con agua micelar o leche limpiadora, después me enjuago bien el producto y ya, cuando tengo la piel bien limpia y seca, paso el agua de avena con un algodoncito. Como la tenemos guardada en la nevera, seguramente, vais a notar que hay algún trocito de aceite de coco, debido a que con el frío del frigorífico, al estar a una temperatura inferior a 24 ºC, este aceite pasará a estado sólido. En el momento en el que tome contacto con vuestra piel, con el propio calor de la misma, se va a fundir en unos segundos y podréis extenderla sin problema. Igualmente, al estar mezclada con el agua de avena, se absorberá rápidamente. Después, una vez que se haya impregnado bien en nuestro cutis, podemos hidratarnos con más aceite de coco, que además, tiene propiedades antibacterianas, o con cualquier otro aceite que os encante, por ejemplo, aceite de almendras, de sésamo, aceite de argán, de girasol. Siempre lo mezclo con un poquito de agua para que penetre mejor en mi piel y no me quede aceitosa. Desde que uso aceites para hidratar la piel, no tengo necesidad de utilizar cremas cosméticas. Mi preferido es el aceite de coco, aunque normalmente, suelo alternarlo con otros tipos. Ahora, en invierno, me gusta mucho el aceite de girasol, queda la piel muy hidratada, pero, como os digo, siempre lo combino con un poquito de agua, para no dejar un exceso de grasa. Por cierto, en el contorno de ojos, es una maravilla.

Aceite de coco virgen extra, en estado sólido

Como habéis podido comprobar, no hace falta gastar demasiado dinero, para mimar y proteger nuestra piel cada noche. Y vosotr@s, ¿cómo utilizaríais el agua de avena casera y enriquecida con aceite de coco? Si tenéis alguna idea interesante, me va a encantar leerla en la zona de comentarios jeje. Espero que os encante esta idea y os animéis a probarlaOs dejo, como siempre, el proceso por escrito por si tuvierais alguna duda. Si hacéis alguna de las delicias del blog, podéis enviarme vuestras fotos a mi correo: belenru16@hotmail.com. Los resultados de vuestras creaciones, aparecerán en próximos vídeos. No olvidéis que podéis imprimir ésta y todas las recetas que se publican en el blog, pinchando en el botón "imprimir receta". Muchas gracias por vuestro siempre apoyo y por todos los comentarios amables que me dejáis a través de Youtube.
Un abrazote gigante,

_____________

Tiempo: 15 minutos   Cantidad: 200 ml

____________________



Ingredientes
  • 1 cucharada de copos de avena: gruesos e integrales
  • 1/2 cucharadita de aceite de coco virgen extra
  • 1 vaso y 1/2 de agua (300 ml)

Preparación
  1. En un cazo, que vamos a poner a fuego fuerte, verteremos el agua.
  2. Una vez empiece a hervir, agregaremos la cucharada de copos de avena, bajaremos el fuego a la mitad y vamos a dejar cocinar 5 minutos.
  3. Pasado el tiempo, retiraremos del fuego, añadiremos la 1/2 cucharadita de aceite de coco, removeremos un poco, cubriremos con una tapadera y dejaremos reposar 10 minutos más, a temperatura ambiente.
  4. Después de los 10 minutos, destaparemos y dejaremos enfriar completamente, a temperatura ambiente.
  5. Una vez fría, vamos a pasar el agua de avena a un bote limpio. En mi caso, voy a reciclar uno que tenía de crema suavizante; tiene una capacidad de 250 ml, pero como hemos hecho poquita cantidad de agua de avena, no lo vamos a rellenar entero.
  6. Con un embudo y un colador, pasamos el agua de avena a nuestro bote. Los copos de avena, que quedan en el colador, podemos utilizarlos para exfoliar la piel de las manos o de la cara; como llevan aceite de coco, van a hidratar muy bien nuestra piel, pero sin dejarla grasienta.
  7. Una vez tenemos el agua de avena en nuestro bote, lo cerraremos bien. Para tener una referencia de cuánto dura, vamos a anotar la fecha de fabricación en la parte trasera del bote, en una pegatina. En mi caso, la conservo en la nevera y me suele durar unas 3 semanas, usándola cada noche en la piel del rostro bien limpia y también en el cuerpo, después de la ducha.
A disfrutar 😌😌




2 comentarios :

  1. ¡¡Hola Belén!! Yo soy muy de potingues, me encanta todo lo que sea para el cuerpo y la cara, y si además, es natural, como esta agua de avena, mucho mejor. De hecho, yo no puedo utilizar algunas cremas porque tengo la piel sensible y encima grasa, así que imagina qué complicado lo tengo a veces para utilizar algunos productos. Para el cuerpo, también me gusta este agua de avena, seguro que la deja estupenda. Muchísimas gracias por este truquito, me ha encantado. Besitos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me pasa un poco lo mismo que a ti, pero con los ojos, siempre me escuece todo jeje. Si tienes la piel grasa, esta agua de avena, es maravillosa y el aceite de coco, lo bueno es que no te deja la piel grasienta, con agua se absorbe enseguida. Un abrazote, gracias por estar siempre ^.^.

      Eliminar